30 de septiembre de 2018

ALCANZAR LA SALVACIÓN SIN ESTAR BUSCÁNDOLA


ALCANZAR LA SALVACIÓN SIN ESTAR BUSCÁNDOLA


Cualquiera podría comenzar esta lectura preguntándose ¿cuál salvación? Es muy válida esa pregunta y más cuando siempre procuro respetar las diferentes ideas, corrientes, posturas o percepciones. Como siempre procuro dejar claro que no pretendo imponer nada y mucho menos decir que mi propuesta es la verdad final.

Iniciemos aclarando lo relacionado a la salvación, demos ejemplos:

  • Caminar por la acera y no por el medio de la calle es decidir salvarnos de un accidente.
  • Ir a la playa y colocarnos protector solar, es decidir salvarnos de un cáncer de piel.
  • Amar a la familia, a los padres y demás integrantes, es asegurar, salvar, nuestra salud emocional, psíquica e incluso física.

Ejercer correctamente nuestro oficio o nuestra vocación es salvar nuestro reconocimiento, el nivel de rendimiento, valoración e incluso autoestima.

Hay momentos en los que hacemos conciencia de las consecuencias que pueden traer nuestras acciones. Cuando actuamos prudentemente es porque reconocemos que es lo correcto, porque de no hacerlo dañamos un trabajo o lastimaríamos la vida de otra persona, aunque nosotros estemos aparentemente intactos.

La frase que inspira este escrito es la que aparece en el libro del profeta Daniel y que Juan Bautista 
De La Salle rescata en varios de sus escritos al momento de orientar a los educadores sobre la gran responsabilidad que poseen.

“Los que tengan el conocimiento brillarán como un cielo resplandeciente, los que hayan guiado a los demás por la justicia brillarán como las estrellas por los siglos de los siglos.” Dn 12,3

No todo ser humano hace consciencia de esta realidad. Hemos escuchado muchas veces la afirmación “el conocimiento es poder”, eso es cierto, el que se ha preparado, estudiado, obtenido información, seguramente tendrá mayor posibilidad de alcanzar algunos objetivos que no obtendrá el ignorante. Tener el conocimiento debe ser utilizado para el bien, para construir, servir, amar, de esa manera estaremos brillando como un cielo resplandeciente; otros nos mirarán como referencia y querrán acercarse, verse beneficiados por esa sabiduría y resplandor.

Ese brillo no llega solo, viene a ser la consecuencia de las acciones asumidas en bien de los otros. Si tu conocimiento lo utilizas para guiar a otros por el camino de la justicia, tu brillo será como el de las estrellas.


Dicho esto, volvemos al título. ¿Será cierto que alcanzamos la salvación sin estar buscándola? Toda acción buena que realicemos, traerá como consecuencia la mirada misericordiosa y paterna de Dios, en otras palabras “la salvación”. Nos estaremos alejando del mal, del odio, de la rabia, de la venganza, de todas esas enfermedades que no nos permiten vivir sanamente del cuerpo, los pensamientos y espíritu.

Un mensaje para los educadores:


“Agradezcan a Dios que haya tenido la bondad de servirse de ustedes para
procurar a los niños tan grandes beneficios, y sean fieles y exactos a
desempeñarlo sin recibir remuneración alguna, para que puedan decir con san
Pablo: el motivo de mi consuelo es anunciar el Evangelio gratuitamente, sin
que les cueste nada a los que me escuchan.”  MR 194, 1,2

Si nosotros los educadores hemos optado libremente por esta profesión, asistimos a las universidades, dedicamos muchas horas a la planificación y a la evaluación; contamos con el poder del conocimiento el cual debe ser utilizado para el bien, para el servicio. Terrible cuando escuchamos a educadores expresarse de forma intimidante hacia sus estudiantes, lamentablemente ellos no quieren reconocer que el poder que poseen se les ha dado para salvar y salvarse. Dios es quien nos ha colocado en el lugar de procurar grandes beneficios a los niños y jóvenes.

En la medida en que ayudamos a otros a ser buenos, estar preparados, alcanzar el conocimiento y reconocer el buen camino, estamos inconscientemente salvando nuestra vida de todo mal. Es un efecto rebote, quien da amor recibe amor. Seguramente alguno estará pensando: “no siempre”, “hay personas muy mal agradecidas”, “estoy casando de hacer el bien para que me paguen con el mal”. Sí, eso es verdad, pero es que en ningún lado he negado esa otra realidad, lo que estoy queriendo reconocer y darle fuerza es a la idea de que por encima de nosotros hay un Dios que nos sostiene a pesar de esas otras realidades y aunque existan personas malas no debemos renunciar a nuestros principios y creencias.

“Y la verdadera razón de esto es que, si cumplen bien la función de guías y conductores de las almas de quienes les están confiados, cumplirán igualmente bien sus obligaciones para con Dios; y Dios los colmará de tantas gracias, que se santificarán ellos mismos en la medida en que contribuyan todo lo que puedan a la salvación de los demás.” MR 205,2,2

Cuando abres una puerta para que otra persona pase, es porque tú tienes la llave, la posibilidad de entrar o salir cuando quieras. Permitir que otros entren en un espacio de bien, de paz y convivencia, es porque eso a ti te hace bien, estás convencido de cuál es el camino para alcanzar la felicidad.

Hago un alto en mis palabras y deseo que vean este pequeño video de la película “La lengua de las mariposas”, considero que pueden expresar muchísimo mejor lo que llevo en mi mente y corazón:



 No quisiera desviar la atención del mensaje en aquellos detalles históricos en los que se desarrolla esta película, una España en la que se están dando los primeros pasos para lo que será la guerra civil española, en donde muchos tuvieron que renunciar “exteriormente” a sus principios para salvar su propia vida y la de sus seres querido; esa es otra “salvación” que lamentablemente existe y nos ha hecho mucho daño.

Hacer siempre el bien, dar lo mejor de nosotros, construir un mejor planeta desde cada una de las aulas, patios, calles; abrir las mentes hacia el conocimiento y despertar conciencias dormidas. Eso es hacer el bien, eso es alcanzar la salvación, eso es utilizar el conocimiento como una fuerza transformadora, aunque a algunos no les parezca o no les convenga que el conocimiento sea difundido y puesto al alcance de todos.

Espero sus comentarios.
Viva Jesús en nuestros corazones… por siempre.

Nota: 
Las citas MR corresponden a las Meditaciones para el tiempo de Retiro de San Juan Bautista De La Salle.

23 de septiembre de 2018

¿QUÉ DEBO HACER PARA CONVERTIRME EN EL MEJOR AMIGO O AMIGA DE MI HIJO?



Antes de abordar el tema considero que debo pedir disculpas a todos los padres y madres de familia porque reconozco que yo no soy el más preparado, pero lo que sí traigo para compartir con ustedes son muchos años de estudios y de experiencia en las aulas y patios de varios colegios; en esos escenarios uno aprende muchísimo de cada niño, joven y adulto con el que se logra compartir la vida. Gracias a ellos es que les dedico estas líneas.

Deseo dejar claro que cuando escribo el concepto “padre” estoy considerando al papá y a la mamá.

¿Qué debo hacer para convertirme en el mejor amigo o amiga de mi hijo? 
NADA, sencillamente porque eres el papá o la mamá y a esa vocación no deberías renunciar, dar vida a otro ser humano es una gran responsabilidad. Dejar de ser el papá para convertirse en el amigo, eso me hace mucho ruido.

Trataré de explicarme. Los mejores amigos o los amigos, se manejan bajo unos códigos de relación y alianzas muy propias de las mismas generaciones que no coinciden con la de los padres, e incluso ese vínculo de amistad podría llegar a romperse en el momento en el que alguno de los dos así lo decida. Los padres y los hijos pueden enojarse, incluso dejar de hablarse, pero nunca dejarán de ser familia.

Los amigos se tapan o esconden ciertos secretos, travesuras o experiencias de la vida que reconocen no tan positivas para que los padres no se enteren nunca, esto tiene su razón de ser, muy válida por cierto. Los amigos se prestan dinero, reconociendo que hay que cancelarlo (ese es el deber ser), los amigos en caso de vivir bajo el mismo techo tienen normas y acuerdos de convivencia, los amigos no están obligados a asumir todos los gastos de comida, salud, estudios, recreación, vestido, etc.




El papá y la mamá desde el nacimiento hasta una edad en la que el hijo se hace independiente asumen:
·         La alimentación
·         El vestido
·         Vivienda
·         Estudios
·         Recreación
·         Salud
          Y otros asuntos del día a día.

Cada una de las necesidades antes mencionadas se cubre de la mejor forma posible, todos los días, sin descanso y con un manual de acuerdos y convivencia. Estas normas las ponen los padres, los hijos las asumen y cuando son grandes se van modificando las que sean necesarias, pero no olvidemos la repetida frase que tiene mucho de razón “mientras vivas bajo este techo se hace lo que yo digo” y al hijo no le queda de otra.

Un hombre o una mujer desde el momento que recibe la noticia de que va a ser papá o mamá comienza a desarrollarse en su interior un sentimiento tan especial que lo lleva a dejar de pensar solamente en él o ella para canalizar todas sus energías en el nosotros, ya no somos dos en la familia, sino tres. Y toda la dinámica familiar comenzará a prepararse en torno al tercero, al más frágil que necesitará de unos padres bien organizados para que le protejan y le hagan sentir totalmente amado.
En el interior de los padres se presenta una mezcla de ternura, alegría, temor, dudas, inseguridad, fortuna, bendiciones, etc. que solamente se irán enfrentando y organizando en la medida en que los días y la convivencia vayan permitiendo cerrar el núcleo de la intimidad, el conocimiento y la reorganización familiar. Es algo maravilloso y bendito, que solamente desde la experiencia del amor se puede entender.

El amor paterno va más allá del deber o del agradecimiento hacia los hijos. Una mamá ama con todo su ser; si se portan bien o mal ella los amará, si alcanzan las metas o no, ella estará ahí para ayudarles, lo mismo hará el papá. Eso no lo hacen los amigos.

El amor paterno por muchas peleas que puedan darse en la relación con los hijos no se termina, no tiene fin. Es imposible que a los padres de familia se les borren todas las imágenes que llevan en su memoria relacionadas a los hijos. Es una impresión plasmada en el corazón.

El rol paterno es para toda la vida, quien pone orden en casa, quien da o niega los permisos, quien tiene la edad, experiencia y capacidad de enseñar son los padres, quien exige y reconoce a nivel académico, quien levanta de las caídas, quien escucha y habla, quien sanciona y llora a escondidas, quien nunca olvida los cumpleaños y fechas importantes.

Los mejores amigos no están para cumplir el rol de papá, y el papá no está para cumplir el rol del mejor amigo.

El hecho de que los padres y los hijos compartan espacios de diversión comunes, temas de conversación, amistades, hobbies, etc. no quiere decir que sean los mejores amigos o amigas de los hijos. No confundamos las cosas.

Es importante tener claridad en el ejercicio de roles, cada uno en la familia cumple su rol; situación que debe permitir el buen clima de convivencia, de desarrollo y crecimiento familiar.

No olvidemos que los cuatro (4) primeros años de vida de un ser humano son importantísimos a nivel educativo, motivacional, amoroso, esto permite definir al hombre o mujer del futuro. Todo acierto que se cometa será fortaleza y todo error será debilidad. No le deben entregar a los colegios la gran responsabilidad de educar a los hijos, los colegios refuerzan, enriquecen, orientan, y ofrecen algunos elementos intelectuales, conductuales, pero nunca sustituyen la educación del hogar.

Como en los escritos anteriores, este tema no se ha terminado, es el inicio del trabajo que se realizaría con padres y madres de familia durante un encuentro.

Espero sus comentarios.

Viva Jesús en nuestros corazones… por siempre.

15 de septiembre de 2018

ESTO ES PARA TI, PAPÁ, MAMÁ, EDUCADOR...


ESTO ES PARA TI, PAPÁ, MAMÁ, EDUCADOR…

“Mamá mi amiguito Schmuel no es igual a nosotros, ¿es buena gente?”

Bruno es un niño de 9 años de edad, el cual ha nacido en Alemania, educado bajo los fuertes y cerrados pensamientos de un padre militar que ocupó altos rangos durante los años 1939 a 1945 (II Guerra Mundial).

Schmuel niño de 08 años de edad, el cual pertenece a una familia judía, educado bajo las enseñanzas de tal religión la cual tiene como guía y enseñanza la Torá y una madre que es maestra y que busca infundir los mejores valores en su hijo.

Cierto día paseando por el campo Bruno se encuentra con Schmuel, dos almas nobles e inocentes comienzan a colocar las bases de una gran amistad, se ríen, juegan, hablan de sus padres y costumbres, reconocen las diferencias pero no se detienen. Cada día es una gran oportunidad para ser felices, sus corazones no entienden de conflictos y guerras, solamente saben que nacieron para amar.

El padre de Bruno trata duramente a los familiares de Schmuel y los padres de este sucumben ante el odio y las torturas.

Algunas frases que Bruno escucha en su casa:

  • ·       En realidad ellos no son personas de verdad.
  • ·      Él está a cargo de un horrible lugar… Sólo es horrible para ellos Bruno, debemos estar muy orgullosos de nuestro padre.
  • ·       Es un campo de trabajo, están ahí porque son enemigos.


Algo del diálogo entre Bruno  y Schmuel:

  • Tú eres mi mejor amigo – dijo – mi mejor amigo para toda la vida.
  •  Se supone que no debemos ser amigos, tenemos que ser enemigos, ¿lo sabías?
  • No es justo, yo atrapado aquí solo, mientras tú estás allá, jugando con tus amigos todo el día.
  •  ¿Por qué no puedes estar afuera? ¿qué hiciste? Soy judío.
  • -Mi madre es maestra en mi escuela y me enseñó alemán -explicó Shmuel-. Ella también habla francés. E italiano. E inglés. Es muy inteligente. Yo todavía no sé hablar francés ni italiano, pero ella dice que algún día me enseñará inglés porque quizá me convenga saberlo -Polonia -dijo Bruno, pensativo, sopesando aquella palabra con la lengua-. No es tan bonito como Alemania, ¿Verdad? Shmuel arrugó la frente. - ¿Por qué no? -preguntó.-Bueno, porque Alemania es el mejor país del mundo -respondió Bruno, recordando lo que había oído decir a su Padre y al Abuelo en muchas ocasiones-. Nosotros somos superiores.


Otras frases:

  •  La niñez se mide a través del sonido, olores y observaciones, antes de que aparezca la sombra oscura de la razón.
  • Que uno contemple el cielo por la noche no lo convierte en astrónomo.
  • ¿A quién se le ocurriría construir un sitio tan horrible?

Inspirado en el libro y la película “El niño con el pijama a rayas”


Dos niños, ángeles de Dios en la tierra, quieren enseñarnos que las fronteras (ideológicas, religiosas, políticas, económicas, sociales, culturales, geográficas) las construimos los seres humanos.
¿Por qué vemos como amenaza a otra persona que viene de otro país, que habla diferente, que tiene distintas costumbres alimenticias, incluso festivas?



Resultado de imagen para EL NIÑO CON EL PIJAMA A RAYAS¿Quién puso entre esos dos niños una cerca de alambres de púas que les impidiera ser libres?


¿Será un problema de educación, de temor o inseguridad?


Que esta tragedia llamada II Guerra Mundial la cual dejó tantas heridas y marcas en las mentes y corazones no se repita nunca más. Digamos no a la xenofobia.

El que sale de su tierra huyendo de un escenario de crisis no lo hace porque le place, todo lo contrario, es imposible explicar lo que se siente en el corazón, lo que se deja, la historia vivida y construida a base de esfuerzos y sacrificios.

Qué hermoso es encontrar personas que te preguntan por tu nacionalidad y te abrazan, te acogen y te permiten sentirte seguro en medio de tantas inseguridades y temores. Una sonrisa, una mano tendida rompen fronteras, tocan un corazón que se convierte en un eterno agradecido que eleva una plegaria al cielo.

Mamá, papá, educador, si estás leyendo estas líneas es porque te interesa construir un mundo diferente, en el que la paz y la hermandad sean normas inviolables, en donde todos somos reconocidos, tenemos un nombre y un apellido en común como lo es “hijos de Dios”, un mismo Padre que nos ha puesto en la tierra con la gran labor de amarnos unos a otros y ayudar al “prójimo”, a ese que está a nuestro lado (próximo) muy cerca, porque al final de nuestra vida por lo único que se nos va a evaluar es en la cantidad de amor que hayamos ofrecido.

Personas malas existen en todos lados, es lamentable y no lo podemos ocultar, la nacionalidad no protege a nadie de las malas acciones (robar, violar, extorsionar, secuestrar, mentir, etc). El mal existe al igual que existe Dios, es la constante lucha entre construir o destruir. Nosotros en medio del manejo de nuestra libertad decidimos a cuál grupo pertenecer. El mal hará todo el esfuerzo posible para que te canses de ser bueno, para que dejes de creer en el perdón, para que renuncies a tus convicciones; mientras que Dios estará trabajando día a día para que reconozcas que tus esfuerzos por ser su imagen y semejanza no son en vano, tu mayor recompensa es la libertad, es la bendición de Dios, es la resurrección.

Siempre he dicho que por un abogado que sea corrupto y mentiroso no quiere decir que todos los abogados sean iguales, o por un médico que sea negligente no quiere decir que todos los doctores sean así, o porque un cura abuse de un menor todos los curas son iguales; todas esas generalizaciones son peligrosas, nacen del mal, no provienen de una mente que desee construir, seamos equilibrados, responsables en nuestras expresiones, sobre todo si hay menores de edad de por medio.

Si queremos un planeta diferente tenemos que comenzar por educar de manera diferente a los niños de hoy. No transmitamos a las nuevas generaciones nuestras heridas, rabias e inseguridades; cada niño tiene derecho a recibir lo mejor para crecer y educarse.

No infundamos en el corazón y en el cerebro de los niños afirmaciones que sabemos no ser ciertas, como por ejemplo: “nosotros somos superiores”; la superioridad no está en el manejo del dinero ni en las armas, está en la capacidad de amar, de perdonar, de servir, de entrar en diálogo con las otras culturas y hacer de ello una fuerza transformadora.

Vemos la segunda guerra mundial tan lejos, incluso tan extraña a nuestra realidad presente que no reconocemos el terrible peligro de estar reproduciendo escenas que se vivieron durante esos años. El terrible peligro de repetir los desastres de la historia en el que nos matamos unos a otros sin reconocer que somos HERMANOS, que por nuestras venas corre la sangre del Dios de la vida, y a nuestros pulmones entra el oxígeno del Dios de la paz.
Resultado de imagen para EL NIÑO CON EL PIJAMA A RAYAS

Seamos ministros de Jesucristo, sus fieles representantes, garantes de que el Reino de los Cielos se instale en la tierra, en donde todos tenemos un puesto en la mesa.

Es mucho lo que tenemos que trabajar internamente desde nuestra propia historia para sanar heridas, liberarnos de pesadas cadenas y comenzar a ser los protagonistas de una nueva historia. (Recomiendo leer el escrito titulado “Humano”)

No más xenofobia, no más odio, que de nuestros labios y acciones solamente salgan piezas que construyan fraternidad.

Espero sus comentarios…

Viva Jesús en nuestros corazones… por siempre.