2 de septiembre de 2018

2da Parte "PASTORAL EDUCATIVA, LA CLAVE DE UNA BUENA GERENCIA"


PASTORAL EDUCATIVA, LA CLAVE DE UNA BUENA GERENCIA
Parte 2

Continuemos con la reflexión del escrito anterior.

Si te pareció fuerte la afirmación que hago unido a la reflexión presentada en el Cuaderno MEL #28 sobre las actividades pastorales dentro de una escuela y su no conexión con el Proyecto Educativo Integral (PEI), entonces vas por buen camino, estás comprendiendo a dónde queremos llegar. Felicitaciones.

Hay coordinadores de pastoral acostumbrados durante años a montar el cronograma de actividades desde la primera semana de clases, o peor aún, dejarlo listo antes de cerrar el año escolar, esto es terrible, por favor, “que esto no se siga repitiendo” por respeto a los estudiantes, a los docentes y demás miembros de la comunidad escolar. ¿Por qué?, ¿qué tiene de malo? Te voy a explicar.

Lo primero que se debe hacer es recibir a la comunidad escolar (no olvides que todos los años hay nuevos integrantes) y si el escenario lo permite se hace una fiesta, ir a lo humano, a lo evangélico, seguidamente se convoca al Equipo de Pastoral para construir una estrategia que les permita diagnosticar la realidad existente, escuchar a los involucrados; todo esto teniendo a la mano el PEI, sin esa herramienta estarán caminando hacia una ruta que posiblemente no responda a las necesidades e intereses colectivos.

Es ahí cuando se procede a construir un plan de acción adaptado a la realidad escolar.

La misa de bienvenida se debe hacer cuando el escenario esté listo y preparado para ello, antes de eso no dará los resultados deseados, ya que cada quien va motivado o desmotivado según su realidad muy personal. Otra pregunta, ¿es obligatorio hacer una misa de inicio de año o se podría realizar otra actividad que asegure los objetivos deseados? Ojo, no estoy en contra de las celebraciones eucarísticas, estoy en contra de las misas mal vividas y desarrolladas.

Pensemos sobre algunas actividades que solemos realizar en los colegios. Las convivencias de cada curso, ¿se buscan hacer en el primer período del año escolar o en el último?, ¿las construye y organiza una empresa que contratamos?, ¿la participación es obligatoria?, ¿están conectadas con el resto de las asignaturas y demás docentes? Ojo, cuidado con las respuestas que damos a esas preguntas, pueden ser la clave del éxito de esta actividad.

¿Se logra ver por qué decimos que el cronograma de actividades NO se debe elaborar según el calendario litúrgico y los intereses del Coordinador de Pastoral o del Coordinador académico o de evaluación? Si logras realizar un cambio en este primer paso, estarás avanzando positivamente en tu acción gerencial.

Es lamentable que vivimos corriendo durante el año escolar por cumplir con las exigencias ministeriales, la presentación de los proyectos curriculares, y otras actividades netamente académicas, sacrificando lo humano, lo pastoral, lo transformador.

La pastoral educativa es una pastoral de PROCESOS. Esto quiere decir que lo que se hace en un grado se verá reflejado en el curso siguiente; lo que se haga el primer mes de clases deberá llevarnos al logro y éxito de los objetivos propuestos para el cierre del año. La educación que le ofrecemos a los docentes se reflejará en los estudiantes y padres de familia y lo que los padres de familia hagan con sus hijos se verá día a día en la dinámica escolar.

“La pregunta pastoral no es de ninguna manera ¿cómo hablaremos de Jesús a los hombres de hoy? La pregunta pastoral es siempre ¿cómo habla Jesús en los hombres de hoy?”.

Rodríguez Mancini Santiago; “Pastoral Educativa, Una mirada de fe sobre la tarea escolar”;
Cuaderno MEL, pág 09, junio 2005.

La primera pregunta hace referencia a técnicas, métodos, estrategias, algo de carpintería.

En cambio la segunda pregunta nos obliga a ir más allá, reconocer a Jesús en cada ser humano, en cada escenario, historia, nos pide aprender a discernir, a mirar sin juzgar, a orar con la vida  y autoevaluarnos. Es reconocer la Palabra, el Verbo, metido en la carne y la palabra de otros, aunque nos choque, nos parezca una locura.

Aceptar ser gerente de una institución educativa católica, exige una serie de sensibilidades, destrezas y conocimientos que no necesariamente se le exigen a un directivo de cualquier centro educativo no católico.

¿Conoces el perfil del director de un colegio que desea ser animado pastoralmente?

Acá mencionaré algunos elementos sin entrar en su análisis, evidentemente no indicaré los que exige la ley de cada uno de los países.

  • ·      Persona creyente en Dios, que haya vivido un proceso de maduración en la fe (recomiendo leer el escrito CREYENTE, en este blog).
  • ·         Con capacidad de escucha, de observación, acogida.
  • ·         Lector diario de los Evangelios.
  • ·         Caminante, encontradizo.
  • ·         Que sepa trabajar en equipo, sin imponerse.
  • ·         Con capacidad de rectificar.
  • ·         Líder, formador, acompañante.
  • ·         Conocedor de la realidad local.
  • ·         Constructor de comunidades.
  • ·         La comunidad escolar es la fuente, el lugar y la meta.


La pastoral educativa exige planificación, reconociendo las diferencias, las desigualdades y los pluralismos que se dan entre los actores educativos. Se debe reconocer la historia de cada uno, su vivencia y realidad, ya que estos elementos serán parte de cada una de las acciones escolares.

Deseo culminar este segundo escrito con la siguiente cita, la cual es sumamente importante al momento de animar desde la pastoral cualquier centro educativo, con ella iniciaré la reflexión del tercer escrito.

Hablar de pastoral educativa es referirnos a una acción muy compleja aunque profundamente unitaria. Lo que le da unidad es la tarea a la que todos los actores son convocados: la síntesis fe-vida - cultura. Esta es la tarea de fondo de la actividad educativa: conformar comunidades de creyentes que se encuentran en torno a los saberes culturales socialmente significativos para su recreación crítica a la luz de la fe, buscando la conversión personal y grupal. Esta es una tarea de todos los actores: directivos, docentes, auxiliares, alumnos, familias, religiosos y seglares.”

Rodríguez Mancini Santiago; “Pastoral Educativa, Una mirada de fe sobre la tarea escolar”;
Cuaderno MEL, pág 11, junio 2005.

Espero sus comentarios…
Viva Jesús en nuestros corazones… por siempre.

2 comentarios:

  1. Hola.. Totalmente de acuerdo que no se debe realizar una planificación sin antes hacer un diagnostico, en mi centro siempre he insistido en que el primer proyecto es ya un diagnostico y nos permite conocer bien a cada grupo y cada estudiante... Con respecto a las misas mal vividas y desarrolladas, es muy cierto, se asiste como por obligación porque la pastoral lo organiza, pero es ya monótono y siempre se ajustan al calendario litúrgico, hay que hacer unas transformación total de la pastoral e insisto que se deben tocar los corazones de toda la comunidad escolar.. Hace falta que este usted en Venezuela y poder poner en practica su aporte. cada vez mas interesante estos escritos hermanos... Saludos

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    1. Hola feliz tarde. Muy agradecido por tus aportes y en especial por ser una excelente participante del blog.
      Apoyando tus comentarios, cada persona es única, la fe y en especial las acciones pastorales no se imponen, se comparten, se ofrecen y se busca comprender desde la realidad del otro su receptividad o rechazo.
      Un paso que debemos ir dando es el quitarnos de nuestro lenguaje "la pastoral" cuando queremos hacer referencia al equipo que forma parte de ese departamento, ya que las pastoral es una acción comunitaria, no son unas personas.
      Me llena de alegría que estos escritos puedan ser socializados.
      Viva Jesús en nuestros corazones... por siempre.

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